Los
meses de abril y mayo incluyen diversas festividades que, como ocurre
con tantas otras fechas señaladas del calendario cristiano, tienen
origen pagano, en este caso relacionado con el esplendor de la primavera.
Quizá el ejemplo más claro sea el de San Isidro Labrador, que se
celebra el 15 de mayo, sin coincidir con la fecha de su fallecimiento. Y
algo similar ocurre con la Fiesta de la Cruz, evidente fusión de ambos
legados.
En
origen, sería una de las celebraciones vinculadas a las flores, que
incluían cánticos, bailes y, en algunos casos, también ya un eje
vertical central, a modo de "totem". Este podía ser un árbol, o
sencillamente un palo cuya cima debía ser alcanzada por los jóvenes
(costumbre esta última que aún se mantiene en muchas localidades
españolas).
Por otro lado, según la tradición cristiana, un 3 de mayo tuvo lugar la
"Invención de la Cruz". Esto es, el descubrimiento por parte de Santa
Elena, madre del emperador Constantino, de la cruz donde Jesucristo
había sido crucificado. Por ello Elena aparece sosteniendo este objeto
en uno de los pilares de la basílica de San Pedro del Vaticano
(imagen).
Cabe
matizar que Constantino no fue, como comunmente se dice, el
gobernante que hizo del cristianismo la religión oficial del Imperio
Romano. Ese paso lo daría Teodosio décadas después. Pero Constantino sí
instauró la libertad de culto, abriendo así la vía para el desarrollo
del potencial de esta religión.
Los
historiadores suelen optar por considerar que esta apertura se debió a
motivos políticos y pragmáticos. La leyenda, sin embargo, habla de que
su conversión se debió a la visión de una cruz en el cielo la noche
anterior a una gran batalla, y que le habría llevado a la victoria en
esta. Pero su especial relación con la Cruz no quedó ahí, sino que, como
hemos mencionado, fue continuada por su madre.
Son
varias las fuentes antiguas que narran la llegada de Santa Elena a
Tierra Santa, si bien este viaje también podría bordear el mito,
considerando que para entonces la peregrina debería tener 75-80 años. La
cuestión es que todas las versiones coinciden en que allí encontró
reliquias, como las de los Reyes Magos o la mencionada Vera Crux, que
diferenció de las otras dos cruces (las de los ladrones ajusticiados
junto a Jesús) gracias a una curación o resurección milagrosa producida
al entrar en contacto con el sagrado leño.
Sea como fuere, sed buenos este puente...
Sea como fuere, sed buenos este puente...
Teo Fernández Vélez
Cazador de leyendas
Imagen: wikipedia